Los molinos de Fuerteventura representan un valioso patrimonio histórico y cultural. Estas estructuras tradicionales, ya sean molinos de viento o de agua, han desempeñado un papel importante en la agricultura de la isla, ya que durante siglos contribuyeron a la producción de harina y al sustento de la población.
En la actualidad, los molinos en Fuerteventura se han convertido en un atractivo turístico único. Muchos de ellos han sido restaurados y preservados, permitiendo a los visitantes explorar la historia y la cultura de la isla. Estos emblemáticos molinos son testigos silenciosos de tiempos pasados y ofrecen una mirada fascinante a la vida agrícola tradicional de Fuerteventura.
Atracción localizada en el pequeño pueblo de Tiscamanita. Dedicada a preservar la memoria de los molinos de viento, que jugaron un papel crucial en la economía agrícola.
Muestra de molinos del siglo XVIII, de una época en que la producción de cereal era una actividad esencial en Fuerteventura y en el resto de Islas Canarias.
Una muestra de molino de viento tradicional y cuya elaboración datada a finales del siglo XIX. Los molinos jugaron un papel fundamental en la historia agrícola de Fuerteventura.
Molino de viento construido en el siglo XVIII. Situado muy cerca de la localidad de Antigua, es parte de los atractivos que acoge el Museo del Queso de Fuerteventura.
Muestra de molinos del siglo XVIII, de una época en que la producción de cereal era una actividad esencial en Fuerteventura y en el resto de Islas Canarias.
Una muestra de molino de viento tradicional y cuya elaboración datada a finales del siglo XIX. Los molinos jugaron un papel fundamental en la historia agrícola de Fuerteventura.