Salvaje y alejada de la civilización, en el Parque Natural de Jandía, la Playa del Cofete es un tesoro que acapara la atención de todos. Sus casi 14 kilómetros de arena son un espacio único y fascinante para visitar.
Su entorno paradisiaco y salvaje la convierten en una playa ideal para perderse, dejar atrás las preocupaciones cotidianas, y disfrutar de un entorno único. No es recomendable para el baño debido al fuerte oleaje predominante.
CÓMO LLEGAR A PLAYA DE COFETE
Debemos atravesar una vía de piedra y tierra que se prolonga por 8,5 kilómetros, con algunos tramos de más dificultad que otros. El Mirador de Cofete es el previo a descubrir la inmensidad de su tamaño y belleza, a la que ayudan las vistas de las montañas de Jandía, en el cabo conocido por El Islote. Tras atravesar un pequeño poblado con restaurante, podemos aparcar y disfrutar del lugar.
VILLA WINTER EN EL COFETE
Construida sobre un diseño del ingeniero Gustav Winter, la Villa Winter o Casa Winter está ubicada en El Cofete, ante la cordillera a modo de muro que cruza la península de Jandía.
ESTRUCTURA DE LA CASA WINTER
El diseño de la casa edificada en 1946, presenta dos plantas, un sótano, un balcón al frente, y la parte más destacada del edificio, una torre situada en la zona noreste con una amplia vista de 360º. La casa presenta paredes grusas, puertas muralladas, diferentes túneles y un bunker.
CASERÍO DE COFETE
En Cofete también podemos encontrar un pequeño poblado formado por unas 25 personas, al que se conoce como Casas de Cofete. También existe un pequeño cementerio, cerca de la playa y el caserío, además de un monumento formado por una estatua verde de un hombre y unas ovejas.
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